es la única cosa que tengo para contar, aunque es bastante pésima.
La semana pasada me junté con unos ex-compañeros de la librería a festejar la salida de un libro editado por ellos. Luego también hablaré sobre este libro. Bueno, la cuestión es que estuvimos largo rato bebiendo y fumando. Luego yo me fui porque tenía mucho sueño y me había levantado temprano.
Listo, esa es la historia.
Mentira, sigue.
Entonces me fui caminando hasta mi casa y agarré Fitz Roy derecho. Había mucha gente en la calle, sería tipo dos y media de la mañana. Yo iba muy colgado y con sueño cuando dos chicas que iban juntas se me acercaron. Estaban muy buenas y una me dijo:
- A ver, por ejemplo...Vos ¿a donde vas?-
- yo me estaba yendo a mi casa - dije enseguida
- Ah , ya? por qué te vas tan temprano?-
- porque tengo mucho sueño -
- Ay, pero no te vayas! No querés venir a tomar algo con nosotras?-
- Ehhh....es que...me estaba yendo a mi casa-
- Pero dale, vení con nosotras a tomar algo, por favor...-
- ... es que me estaba yendo a mi casa...- dije sin más
En este punto las chicas se miraron
- bueno está bien - Dijo una - igual gracias...-
Yo sonreí estúpidamente y seguí de largo.
Qué paso: la verdad es que toda la charla se dió en piloto automático en mi. Algo así como si respondiera sin pensar un segundo. Dos cuadras más adelante me di cabal cuenta de que había rechazado sin dudar un segundo, cierta oportunidad con dos chicas. Es triste, pero lo más triste es que mi inconciente realmente NO TENÍA ÁNIMO.
Ah no, hay algo más triste: cuando le conté lo ocurrido a mi novia me dijo
- Nardo sos un dormilón -
